El expresidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Eduardo Facussé, lanzó fuertes señalamientos este miércoles al afirmar que el Partido Libertad y Refundación (Libre) estaría utilizando distintos hoteles de la capital para alojar a sus asesores, quienes —según él— realizan operaciones políticas desde estos establecimientos.
Facussé afirmó que cualquier ciudadano puede comprobarlo. “Váyase a cualquier hotel y están hospedados, aquí están los asesores del actual gobierno”, dijo a medios de comunicación, asegurando que estas personas poseen experiencia previa en otros países donde, según él, han impulsado estrategias para “obstruir la democracia”.
El empresario aseguró que lo que está en juego va más allá del actual proceso electoral. A su criterio, la intención de estos grupos es allanar el camino para implementar en Honduras un modelo económico que ha fallado en otras naciones y que, sostuvo, no puede ser replicado en el país.
También exhortó a la población hondureña a acudir temprano a las urnas el próximo 30 de noviembre. Señaló que la mayor respuesta cívica será demostrar, a través del voto, que la ciudadanía rechaza modelos económicos que —según él— han sido sinónimo de retroceso.
En sus declaraciones, Facussé insistió en que la confianza en las instituciones debe prevalecer, recordando que la democracia hondureña descansa también en la participación activa y en el respeto a la independencia de los entes del Estado.
Además de sus críticas al partido oficialista, el expresidente del Cohep dirigió señalamientos contra el consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, a quien acusó de estar detrás de retrasos en el proceso electoral con la intención de afectar su normal desarrollo.
Según Facussé, dichos atrasos buscarían crear un ambiente de incertidumbre, especialmente ante su percepción de que la candidata presidencial de Libre no cuenta con la preferencia suficiente para asegurar un triunfo en las elecciones generales.
Finalmente, reiteró su llamado a los ciudadanos para que defiendan la institucionalidad acudiendo a votar masivamente y manteniéndose vigilantes del desarrollo del proceso, al considerar que la estabilidad democrática del país está bajo presión.