Durante el domingo 16 de noviembre de 2025, la Tierra experimentó una oleada sísmica intensa: según el World Earthquake Report de Volcanodiscovery, se registraron alrededor de 449 sismos en todo el planeta.
De ese total, los datos destacan 1 sismo de magnitud 5.0, 38 con magnitudes entre 4 y 4.9, y más de 100 temblores moderados (magnitud 3).
La concentración de tantos eventos sísmicos en un solo día ha encendido alarmas en varios observatorios. Según expertos consultados por Volcanodiscovery, el número es elevado comparado con los promedios diarios habituales.
En Latinoamérica, el Perú reportó un sismo de magnitud 4 con epicentro cerca de Arequipa, según el Centro Sismológico Nacional (Censis). infobae Además, otro sismo de magnitud 4.2 se registró en la provincia de Talara, en la región de Piura.
En México, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) confirmó una serie de temblores durante la madrugada del domingo en varios estados: Jalisco, Baja California, Michoacán, Oaxaca y Chiapas. Las magnitudes oscilaron entre 3.5 y 4.1.
Mientras tanto, el reporte volcánico de Volcanodiscovery también señala actividad sísmica cerca de volcanes: por ejemplo, en la cadena volcánica Apaneca de El Salvador se detectó un temblor de magnitud 3.0.
Aunque muchos de estos sismos no representan un peligro inminente para la población, la acumulación de tantos movimientos en un solo día subraya la importancia de mantener sistemas de monitoreo de riesgo robustos y coordinados, especialmente en zonas vulnerables.
Organismos de gestión de emergencias y científicos hacen un llamado a la alerta continua: aunque la mayoría de estos temblores son pequeños, su frecuencia demuestra que la Tierra puede mantenerse “activa” por largos periodos, y es vital que comunidades y autoridades no bajen la guardia.