Caracas, 24 de agosto de 2025.
Después de meses de silencio, incertidumbre y denuncias, 13 presos políticos en Venezuela recuperaron su libertad, entre ellos el exdiputado Américo de Grazia y el dirigente opositor Pedro Guanipa. Para sus familiares, este domingo marcó el fin de una espera llena de angustia y denuncias por tratos inhumanos y enfermedades no atendidas.
Las excarcelaciones ocurren más de un año después de las controvertidas elecciones presidenciales de julio de 2024, en las que la comunidad internacional denunció fraude, y tras las cuales se intensificaron las detenciones arbitrarias.
El anuncio fue confirmado por los opositores Henrique Capriles y Tomás Guanipa, quienes celebraron lo que calificaron como un paso positivo, aunque insuficiente.
“Hoy, varias familias vuelven a abrazar a los suyos. Pero sabemos que quedan muchos tras las rejas y de ellos no nos olvidamos”, escribió Capriles en su cuenta de X.
De los liberados, ocho fueron excarcelados con libertad plena y cinco recibieron arresto domiciliario. Entre ellos se encuentran también el exalcalde de Maracaibo Rafael Ramírez Colina, el exalcalde de Cabimas Nabil Maalouf y varios exfuncionarios locales.
La ONG Clipp había advertido en mayo sobre el grave deterioro de salud de De Grazia, quien padecía infecciones pulmonares no tratadas. A su vez, Pedro Guanipa, detenido en septiembre de 2024 mientras intentaba viajar a Colombia, ha sido una figura emblemática del ala más crítica del régimen.
En contraste, el gobierno de Nicolás Maduro insiste en que Venezuela está "libre de presos políticos", y asegura que los detenidos fueron procesados por "graves delitos".
Sin embargo, cifras del Foro Penal revelan una realidad distinta: 815 personas continúan privadas de libertad por razones políticas, incluyendo cuatro adolescentes y 89 extranjeros.