La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, se pronunció con firmeza este miércoles ante las nuevas declaraciones del mandatario estadounidense, Donald Trump, quien volvió a sugerir posibles operaciones militares dentro de territorio mexicano bajo el argumento de combatir a los carteles del narcotráfico. Para la jefa de Estado, tal escenario simplemente no tiene cabida.
Sheinbaum afirmó que México no permitirá ninguna intervención extranjera y subrayó que ya existe una coordinación bilateral en materia de seguridad. “Eso no se va a dar porque no es necesario, primero. Segundo, porque somos un país soberano y nunca aceptaríamos una intervención. Y tercero, porque ya tenemos un entendimiento con Estados Unidos”, expresó durante su conferencia diaria en Palacio Nacional.
Las declaraciones de Trump fueron realizadas en una entrevista con el medio estadounidense Politico, donde aseguró que estaría dispuesto a ordenar acciones militares dentro de México, comparando dichas operaciones con ataques que ya autorizó contra embarcaciones vinculadas al narcotráfico en el Caribe, cerca de Venezuela y Colombia.
Consultada sobre la reiteración de este tipo de comentarios por parte del presidente estadounidense, Sheinbaum evitó ampliar la confrontación. Señaló que no responderá a cada pronunciamiento de Trump, pero destacó que, pese a las diferencias, ambas naciones han mantenido un trato respetuoso.
“Él tiene su pensamiento, en muchas cosas no estamos de acuerdo, pero siempre buscamos la mejor relación entre México y Estados Unidos”, puntualizó, recordando que ambos gobiernos trabajan en mecanismos de cooperación que no requieren medidas de fuerza.
Las palabras del mandatario estadounidense ocurren en un contexto marcado por la ejecución del operativo Lanza del Sur, una estrategia militar norteamericana en la región para frenar rutas del narcotráfico en el Caribe y el Pacífico. Bajo este operativo, Estados Unidos ha destruido al menos una veintena de embarcaciones supuestamente cargadas de droga.
Informes señalan que estas acciones han resultado en la muerte extrajudicial de más de 80 tripulantes catalogados como “narcoterroristas”, un elemento que ha despertado críticas de organismos internacionales por el uso excesivo de la fuerza y la falta de procesos judiciales.
La postura de Sheinbaum refuerza la línea diplomática que México ha sostenido por décadas: rechazar cualquier intervención y preservar una relación bilateral basada en el respeto mutuo. El mensaje también busca enviar una señal de estabilidad ante un panorama regional que se torna cada vez más tenso.
