El candidato a la presidencia por el Partido Liberal, Salvador Nasralla, hizo público hoy que prepara una demanda internacional contra el vicecanciller Gerardo Torres, acusándolo de cometer difamación y de politizar un video en el que aparece una menor de edad. 

Durante una entrevista televisiva, Nasralla declaró:

“Gerardo Torres es un delincuente, le va costar muchísimo salir del hoyo en que se metió porque viene una demanda internacional contra él.” 

Según el aspirante liberal, la publicación del funcionario constituye una conducta grave al introducir la imagen de la menor en el debate político. “Es gravísimo lo que hizo, especialmente contra la niña”, afirmó. 

La controversia tiene su origen en una difusión pública del vicecanciller Gerardo Torres —quien también es dirigente del partido gobernante Libertad y Refundación (LIBRE)— en la que comparó a Nasralla con el financiero estadounidense Jeffrey Epstein, condenado por delitos sexuales. 

Torres acompañó esa comparación con un video donde aparece Nasralla abrazando a una niña (con rostro censurado) y sugirió que el liberal debe ser investigado por supuestos comportamientos inapropiados hacia mujeres y menores. 

El Partido Liberal reaccionó de inmediato, calificando las declaraciones de Torres como “injurias delicadas y nefastas” y demandando una retractación pública, así como acciones institucionales frente al incidente.  Mientras tanto, la madre de la menor aseguró que el video fue grabado por ella, que la imagen fue usada fuera de contexto y que rechaza que su hija sea implicada políticamente.

Gerardo Torres, por su parte, rechazó ofrecer disculpas: “No me voy a disculpar. Discúlpense ustedes, y que se disculpe Nasralla con la niña”, replicó en sus redes sociales, defendiendo su actuación como legítima para hacer visible lo que él considera cuestionable. 

Este episodio profundiza el clima de confrontación política en Honduras a pocos meses de las elecciones generales. La demanda anunciada por Nasralla podría implicar impases diplomáticos si se concreta a instancias internacionales. El caso sigue siendo monitoreado por observadores nacionales e internacionales.