El 22 de septiembre comenzará el juicio contra Marco Vallecillo, exjuez que dirigía el circuito de Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y Corrupción, y cuya captura en agosto de 2024 marcó un episodio de alto impacto en el sistema judicial hondureño. El proceso se prolongará hasta el 26 del mismo mes.
En la etapa preliminar, el juez del caso aceptó todas las pruebas ofrecidas tanto por el Ministerio Público como por la defensa. Este paso dejó listo el terreno para que el juicio oral y público arranque con una carga probatoria amplia.
La fiscalía acusa a Vallecillo de extorsión. El requerimiento señala que, junto con Nelson Sierra, presionaba a un testigo protegido bajo la amenaza de que la Uferco presentaría un requerimiento fiscal en su contra si no cedía a sus demandas.
El monto exigido alcanzaba los tres millones de lempiras, suma que los imputados habrían buscado obtener en un esquema de coacción y abuso de autoridad. El Ministerio Público sostiene que este caso refleja prácticas que erosionan la confianza en el sistema de justicia.
La captura de Vallecillo ocurrió el 17 de agosto de 2024, un hecho que generó repercusión mediática y abrió un debate sobre la vulnerabilidad de los tribunales ante redes de corrupción y presiones indebidas.
Por su parte, la defensa asegura que las pruebas no demuestran responsabilidad directa y que se tratará de desvirtuar los señalamientos durante el juicio, alegando inconsistencias en el testimonio del testigo protegido.
El desarrollo del proceso será seguido de cerca por distintos sectores de la sociedad civil y la comunidad jurídica, que ven en este caso una oportunidad para evidenciar si existe voluntad real de combatir la corrupción.
Lo que ocurra entre el 22 y el 26 de septiembre definirá no solo la situación judicial de Vallecillo, sino también la credibilidad del sistema frente a un delito que, de comprobarse, golpea directamente a la institucionalidad hondureña.