Donald Trump se convirtió el jueves en el primer presidente de Estados Unidos condenado por un delito, cuando un jurado de Nueva York lo declaró culpable de falsificar documentos para encubrir un pago para silenciar a una estrella porno antes de las elecciones de 2016.
Después de deliberar durante dos días, el jurado de 12 miembros anunció que había declarado culpable a Trump de los 34 cargos que enfrentaba. Se requería unanimidad para cualquier veredicto.
El juez Juan Merchán fijó la sentencia para el 11 de julio, tres días antes del inicio de la Convención Nacional Republicana, donde se espera que se nomine formalmente a Trump como candidato presidencial republicano.
Poco después de conocerse el veredicto, Trump se dirigió a los periodistas fuera de la sala del tribunal. El expresidente calificó a la decisión como una “vergüenza” y reiteró su inocencia, al decir que el juicio estuvo amañado.
“Seguiremos luchando”, dijo Trump. “Lucharemos hasta el final y ganaremos”.
Luego de esto, Merchán abandonó el banquillo para regresar unos 20 minutos después e informar que el jurado había enviado una nota indicando que había llegado a un veredicto. Dijo que el jurado había solicitado 30 minutos más para completar el formulario de la decisión.
El jurado encontró a Trump culpable de falsificar documentos comerciales después de asistir a un juicio de cinco semanas que incluyó el testimonio explícito de la estrella porno Stormy Daniels sobre un encuentro sexual que ella aseguró haber tenido con Trump en 2006, mientras él estaba casado con su actual esposa, Melania.
La falsificación de documentos comerciales suele ser un delito menor en Nueva York, pero los fiscales de la oficina del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, lo elevaron a delito grave con el argumento de que Trump estaba ocultando una contribución ilegal de campaña.
Trump se quejó de que no podía conseguir un juicio justo en su ciudad natal, predominantemente demócrata.
El caso es ampliamente considerado como el de menor trascendencia de los cuatro procesos penales que enfrenta Trump.
También es probable que este caso sea el único que vaya a juicio antes de las elecciones, ya que los demás se retrasan por cuestiones de procedimiento.
De ser elegido, Trump podría cerrar los dos casos federales que lo acusan de intentar revertir ilegalmente su derrota electoral de 2020 y de manejar mal documentos clasificados después de dejar el cargo en 2021. No tendría el poder de detener un caso separado de subversión electoral que tiene lugar en Georgia.
[Con información de Reuters y AP]
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