En medio del ambiente tenso que acompaña el escrutinio electoral en la capital, el alcalde Jorge Aldana volvió a fijar postura: su ventaja, dijo, no solo es clara, sino sostenida tanto en los registros del Consejo Nacional Electoral (CNE) como en verificaciones independientes como las realizadas por el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA). Desde el inicio del conteo, insistió, la tendencia ha sido la misma.
El edil capitalino fue enfático al señalar que, según sus cifras, las actas lo colocan con al menos un 3.5 % de ventaja sobre su contendiente. “Desde el primer momento nos hemos mantenido al frente con un promedio de 1,000 votos”, afirmó, subrayando que la consistencia del dato es la que ha permitido sostener la seguridad con la que habla de la victoria.
Aldana también se refirió a las siete actas con irregularidades que él mismo presentó el pasado jueves ante las autoridades. Según denunció, en esos documentos se le habrían añadido cerca de cinco mil votos inexistentes al candidato del Partido Nacional, una maniobra que calificó como un intento de manipular la voluntad popular.
Pero las alertas no terminan ahí. El alcalde aseguró que ahora tienen información sobre un nuevo intento de alterar la percepción pública: “En una nueva trampa de la mano peluda, seleccionaron alrededor de 200 actas convenientes para el Partido Nacional”, afirmó, advirtiendo que se trataría de una estrategia para confundir a los electores y sembrar dudas sobre los resultados.
A pesar de lo que describe como intentos de adulterar el proceso, Aldana reafirmó que su equipo está vigilante. “Vamos a cuidar los votos para que la mano peluda no haga de las suyas”, dijo, dejando claro que no permitirá que se manipulen los resultados en la capital. El compromiso, aseguró, es con el voto de las y los capitalinos.
El jefe edilicio destacó además que la defensa del voto no es solo un acto político, sino un deber hacia la ciudadanía que depositó su confianza en las urnas. “Desde que inició el conteo, nosotros hemos ido ganando”, reiteró, confiado en que al final del escrutinio el resultado reflejará lo que él considera un mandato claro: “En la capital, lo bueno sigue y sigue”.
En declaraciones que buscan enviar un mensaje de calma, Aldana señaló que su equipo continúa comparando actas, verificando inconsistencias y manteniendo presencia en los centros de transmisión. A su juicio, la transparencia en esta fase es clave para evitar que prosperen intentos de distorsionar los datos.
Mientras continúan los reclamos de su parte sobre las presuntas anomalías en el manejo de actas, el proceso de escrutinio avanza entre acusaciones cruzadas y exigencias de claridad. Aldana, por su parte, asegura que no permitirá que la incertidumbre eclipse lo que considera una tendencia firme e indiscutible.
