Caracas, 8 de septiembre de 2025. — El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, aseguró este lunes que el país se mantiene “alerta y sin miedo” frente al despliegue militar estadounidense en el mar Caribe, movimiento que Caracas interpreta como un intento de forzar un cambio de gobierno.

En una rueda de prensa televisada por el canal estatal VTV, Padrino advirtió que el operativo norteamericano es observado “minuto a minuto” por las autoridades venezolanas. “Todo el despliegue de destructores, drones y helicópteros levantados desde cubiertas de buques está claramente apuntando a Venezuela”, expresó el alto mando militar.

El ministro subrayó que la nación cuenta con un pueblo “vigilante” y una Fuerza Armada en “permanente alerta” ante cualquier situación que atente contra la soberanía o la seguridad física del país. Aseguró que los venezolanos están preparados para defenderse de lo que calificó como una amenaza directa a la integridad territorial.

Desde finales de agosto, Estados Unidos ha movilizado ocho buques de guerra con misiles y un submarino nuclear en la región, alegando que su propósito es combatir el narcotráfico que “contamina las calles” estadounidenses. Además, Washington ordenó recientemente el despliegue de diez cazas F-35 en la base aérea Muñiz de Puerto Rico.

El Gobierno de Donald Trump sostiene que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, está involucrado en violaciones a las leyes internacionales de narcóticos. Caracas rechaza estas acusaciones y denuncia que forman parte de una estrategia de deslegitimación.

Padrino López fue más allá al señalar que, además de la presión militar, Washington estaría intentando “desestabilizar las instituciones desde adentro”, provocando divisiones en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y fomentando traiciones internas. Frente a ello, hizo un llamado a consolidar la unidad y estabilidad política del país.

El presidente Maduro, en declaraciones emitidas el viernes, exigió a Estados Unidos abandonar lo que calificó como un “plan violento de cambio de régimen” en América Latina y el Caribe. “Exigimos respeto a la soberanía de Venezuela”, expresó el mandatario.

El choque de narrativas refleja un clima de máxima tensión en el Caribe, donde la confrontación entre Washington y Caracas se intensifica y amenaza con desencadenar una crisis regional de grandes proporciones.