Washington, 18 de agosto de 2025 – En una cumbre de alto voltaje geopolítico, el presidente de EE. UU., Donald Trump, recibió hoy en la Casa Blanca al presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky.
El encuentro incluyó también a importantes líderes europeos y se centró en establecer un marco que pueda conducir a una paz sostenible, sin obviar tensiones sobre concesiones territoriales y garantías políticas.
1. Seguridad garantizada, aunque con ambigüedades
Trump afirmó que Estados Unidos ofrecerá “muy buenas” garantías de seguridad a Ucrania dentro de un posible acuerdo de paz, modalidad similar a la protección del Artículo 5 de la OTAN, pero fuera de esa estructura militar. Su enviado Steve Witkoff reveló que Rusia habría aceptado incluir estas garantías, aunque las condiciones detalladas no se hicieron públicas.
2. Presión para una tregua… con matices
Europa exigió que cualquier progreso negociador incluyera un cese inmediato del fuego, una posición defendida por figuras como el canciller alemán Friedrich Merz y el presidente francés Emmanuel Macron. Trump, sin embargo, suavizó esa demanda, afirmando que la paz puede negociarse incluso mientras persista el conflicto.
3. Tensión por posibles concesiones territoriales
Han surgido indicios de que una propuesta preliminar discutiría cesiones territoriales, incluidas partes de Donetsk, Luhansk y posiblemente la aceptación formal de Crimea como parte de Rusia.
Zelensky rechazó enfáticamente cualquier cesión sin una garantía de alto el fuego, mientras los líderes europeos insistieron en que la integridad territorial ucraniana es innegociable.
4. Europa mantiene respaldo firme
Una delegación unida de altos mandatarios liderada por Ursula von der Leyen, Keir Starmer, Macron, Merz, Rutte, Meloni y Stubb se solidarizó con Zelensky. Su presencia indicó un compromiso colectivo para proteger a Ucrania frente a presiones que puedan comprometer su soberanía.
5. Puente hacia un encuentro trilateral
Trump expresó su intención de promover una reunión directa entre él, Zelensky y Putin. Aunque aún sin fecha, esta estrategia representa una vía para acelerar negociaciones finales.
En resumen, las conversaciones mostraron señales de progreso tangible en materia de seguridad, aunque quedaron en el aire múltiples interrogantes sobre territorialidad, mecanismos efectivos de protección, y el rol futuro de Europa y EE. UU. en el apoyo diplomático y militar de Ucrania. La cumbre marca una nueva etapa, donde el equilibrio entre compromiso y presión continúa definiendo el camino hacia un posible acuerdo de paz.
