Mariana González, hija del líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia, volvió a alzar la voz para exigir que se le permita comunicarse con su esposo, Rafael Tudares, quien permanece detenido desde hace 215 días sin que —según afirma— se le haya concedido “ni una simple llamada” telefónica.

En un mensaje difundido este domingo a través de la red social X, González denunció que desconoce el lugar de reclusión de Tudares, lo que califica como una “desaparición forzada”. “Más de siete meses sin que las autoridades me permitan verlo o constatar su vida e integridad física”, expresó.

El caso se remonta al 7 de enero, apenas tres días antes de la juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato, cuando Tudares fue arrestado junto al defensor de derechos humanos Carlos Correa —posteriormente liberado— y el excandidato presidencial Enrique Márquez.

El 23 de junio, un tribunal autorizó el avance a juicio contra Tudares bajo acusaciones de “forjamiento, conspiración, terrorismo, asociación, legitimación y financiamiento”. Su esposa insiste en que es inocente y que “no tiene nada que ver con el conflicto político” que, asegura, lo mantiene privado de libertad.

Mariana González sostiene que su esposo es “una víctima” de la crisis política que estalló tras las denuncias de fraude electoral de la oposición en los comicios de julio de 2024, que dieron la reelección a Maduro. Esa misma crisis llevó a Edmundo González Urrutia a exiliarse en España en septiembre del año pasado, desde donde continúa reclamando la Presidencia de Venezuela.