El ajuste en los precios de los combustibles vuelve a marcar la agenda económica del país. A partir del lunes 22 de septiembre, los hondureños deberán enfrentar un nuevo incremento en todos los carburantes, según confirmó la Secretaría de Energía.

El diésel, combustible clave para el transporte de carga y pasajeros, alcanzará un valor de 88.43 lempiras por galón, tras un alza de 84 centavos. Esta variación podría repercutir directamente en los costos de distribución de productos y en los precios finales al consumidor.

La gasolina súper, por su parte, llegará a 105.06 lempiras, luego de experimentar un aumento de 87 centavos. La regular no queda exenta de este impacto, pues su valor será de 97.39 lempiras, tras un ajuste de 79 centavos.

El queroseno, utilizado en numerosos hogares y en sectores rurales, subirá 99 centavos, alcanzando un costo de 76.27 lempiras por galón, una cifra que preocupa a las familias que dependen de este energético.

En contraste, el gobierno mantendrá el subsidio al GLP doméstico, el cual se conservará en 238.13 lempiras. Esta medida busca proteger a los hogares hondureños de una mayor presión en la economía familiar.

El GLP vehicular, sin embargo, sí se verá afectado con un alza de 31 centavos, situando su precio en 45.67 lempiras, lo que impactará a quienes utilizan este gas como alternativa de transporte.

Este es el segundo ajuste consecutivo en dos semanas, lo que mantiene en alerta tanto a transportistas como a consumidores, ante la posibilidad de un efecto en cadena que derive en un encarecimiento del costo de vida.

Las autoridades de Energía explicaron que las variaciones responden a factores internacionales ligados al comportamiento del petróleo, lo que coloca nuevamente al país ante un escenario económico desafiante.