15 de julio de 2025 — El general de las Fuerzas Armadas de Honduras, Ramiro Muñoz, confirmó este lunes su salida como director del Instituto Nacional Penitenciario, luego que la presidenta Xiomara Castro le solicitara formalmente la renuncia al cargo que desempeñó durante dos años.
Muñoz, quien asumió el cargo de presidente de la Comisión Interventora del Instituto Nacional Penitenciario (INP) tras la masacre de 46 mujeres en un centro penal femenino, calificó la decisión como una transición ordenada y necesaria. Reconoció que su tiempo en la dirección fue excepcional, ya que se trataba de un cargo político y no militar. “Esto era temporal, no corresponde a un militar estar en el sistema penitenciario”, declaró.
El nuevo designado en el cargo será el general Mejía Medina, a quien Muñoz describió como su formador y “mil veces mejor” que él. Destacó que el relevo es positivo: “El sistema penitenciario hoy solamente es ganancia. Esto no es político, es un tema de seguridad nacional”.
Muñoz defendió su gestión afirmando que no ha habido revueltas ni asesinatos dentro de las cárceles bajo su dirección, y resaltó avances como la construcción de nueva infraestructura, implementación tecnológica, academias de formación penitenciaria y un combate frontal contra la corrupción. “Lo que se ha hecho para quitarle el control a las organizaciones criminales no tiene precio, porque nadie lo había querido hacer”.
A pesar de rumores sobre su renuncia voluntaria, el general aclaró que los militares no renuncian a sus misiones, pero aceptan con disciplina las decisiones superiores. “Quien a usted lo pone, lo quita cuando lo considera conveniente. Si quiero un lugar donde no me despidan, tengo que poner una empresa y ser el dueño”, dijo.
Muñoz también desmintió supuestas tensiones con el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Roosevelt Hernández, afirmando que esa pregunta debía responderla él. Rechazó cualquier especulación sobre denuncias penales o huida del país. “¿Usted cree que voy a agarrar un avión para salir corriendo? No hombre. A todos los tratamos por igual: maras, narcos, criminales. No me hice del lado de nadie. El que lo haga va a terminar preso o muerto”, sentenció.
El general saliente dijo desconocer cuál será su siguiente asignación, decisión que corresponde al alto mando militar. Mientras tanto, insistió en que entrega el cargo con la frente en alto y la misión cumplida.