Florida, EE.UU., 1 de julio de 2025 – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inauguró este martes, junto al gobernador de Florida, Ron DeSantis, un nuevo centro de detención para migrantes en el sur del estado, conocido como “Alligator Alcatraz”, ubicado en pleno corazón de los Everglades, una vasta zona de humedales habitada por caimanes.
Durante la ceremonia, Trump destacó que el nuevo centro forma parte de su plan de endurecimiento de la política migratoria en la frontera sur y en estados clave como Florida. “No más demoras. Vamos a actuar rápido para proteger a los estadounidenses”, afirmó el mandatario republicano.
Por su parte, DeSantis explicó que uno de los elementos distintivos del centro será la incorporación de jueces de inmigración “in situ”, lo que permitirá acelerar los procesos de deportación en un plazo de uno o dos días. El gobernador incluso sugirió que miembros de la Guardia Nacional de Florida podrían actuar como jueces, en colaboración con el Departamento de Justicia, mientras se obtienen las autorizaciones necesarias.
“Estamos ofreciendo a nuestra Guardia Nacional y a otros miembros del Estado para que actúen como jueces de inmigración. Estamos trabajando con el Departamento de Justicia para obtener las aprobaciones”, declaró DeSantis frente a la prensa, al pie del nuevo centro, situado en un aeropuerto abandonado a unos 70 kilómetros al oeste de Miami.
“Alligator Alcatraz” se convierte así en símbolo del enfoque duro de la administración Trump hacia la migración irregular, generando ya reacciones divididas entre sectores conservadores que respaldan la medida y defensores de derechos humanos que critican su ubicación remota, la rapidez del proceso y el posible uso militar en funciones judiciales.
El recinto comenzará operaciones inmediatas y se espera que albergue a cientos de migrantes detenidos en redadas recientes en Florida y otros estados del sur.